LA SALUD Y LA ECONOMIA COMUNITARIA EN LOS TIEMPOS DEL CoVID-19.



Por Juan Carlos Cué Vega.

Cónsul de México en Brownsville.

 

Estimados compatriotas:

Esta semana, la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó al mundo entero sobre la posible pandemia surgida por la dispersión de la enfermedad causada por el virus denominado Coronavirus. Al mismo tiempo, los contagios en Italia, España y otros países en Europa, alertaron a la economía mundial causando grandes y fuertes sacudidas a los mercados y a las bolsas de valores más relevantes del mundo. Los altos oficiales del sector salud de los Estados Unidos, con alarma, anunciaron la inevitable expansión del mal en este país. Finalmente, el mundo entero está advertido.

¿Qué efectos tiene esto para nuestra comunidad fronteriza, en términos de salud, economía y políticas de previsión? ¿Y qué podemos aportar nosotros para la contención de este mal?

Una parte de nuestra tarea como cónsules es orientar acciones que resulten de interés para nuestra comunidad y es por ello que en este artículo nos ocupamos de este importante tema social al que creemos debe dársele toda la importancia que tiene.

En efecto, este problema empezó en un lejano lugar en la República China. Este sólo hecho, nos hace creer que debido a la gran distancia existente entre nuestra ciudad y aquel país nada nos pasará. Error. Hoy en día en 30 países ya ha llegado el mal. En el mundo moderno, debido a la globalidad, ya nada nos es lejano, nada nos es ajeno y no estamos protegidos si no tomamos las medidas necesarias.

En términos de salud, considerando el número de muertes que este virus ha causado, las autoridades y población fronteriza tenemos la gran responsabilidad de evitar que la eventual llegada de la enfermedad, sea de consecuencias fatales y hacer lo que esté a nuestro alcance. Deben tomarse adecuadas políticas sanitarias, realizar campañas informativas intensas si bien no alarmistas, coordinar y habilitar la disponibilidad de medicinas, hospitales, camas para enfermos, guantes, mascarillas y otros enseres médicos.

En lo individual, todas las recomendaciones apuntan a constante y consciente lavado de manos con agua y con jabón, aplicación de pequeñas cantidades de alcohol, evitar contacto con personas que puedan tener algún tipo de contagio, evitar los abrazos, los saludos de beso y mano y cubrirse la boca al estornudar, toser y demás. La utilización de mascarillas es aconsejable y su constante cambio también. Evitar la manipulación de dinero, limpiar constantemente las manecillas y empuñaduras de puertas, son algunas de las acciones sencillas que cada uno de nosotros debemos tomar. Con ello estaremos contribuyendo grandemente. Estas acciones, sumadas con las que las autoridades tomen, serán beneficiosas y les invito a que, en cada hogar mexicano por lo menos, se realicen.

Por otra parte, el efecto en la economía no sólo es en los mercados y bolsas. Me refiero principalmente a la economía familiar y cómo podemos nosotros cuidar nuestros gastos personales o familiares o de nuestras empresas o negocios. Debemos recordar también que en caso de que nos veamos obligados a estar en cuarentena, será necesario tomar las previsiones y adquirir con antelación productos médicos y alimentos para que nuestras alacenas estén debidamente abastecidas y podamos resistir al menos los catorce días que recomiendan los especialistas.

Debemos tomar en cuenta también que habrá efectos sobre nuestro bolsillo. Se espera que los precios de la gasolina al menos sufran algún incremento tomando en cuenta que China, que es uno de los principales consumidores de este hidrocarburo, ha dejado de utilizar pues hay menos viajes, menos movimiento de autos, por lo que afecta los precios mundiales y esto afecta directamente a nuestros bolsillos. Tomemos pues nuestras precauciones y medidas. Recuerden que no hay por el momento una vacuna y se prevé al menos un año para que exista. Sólo podemos hacer esto, pero todos.

Algunas empresas, como las maquiladoras del lado mexicano, ya actúan y hacen su parte para que no haya grandes afectaciones. Cooperemos con ellas.

Para terminar, reitero que en el Consulado de México estamos para ayudarle y orientarle Venga con nosotros, Estamos para servirle.

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