Por Juan Carlos Cue Vega
Consul de Mexico en Brownsville.
Estimados compatriotas:
Dos mil armas provenientes de diversas partes del mundo y de los Estados Unidos cruzan diariamente hacia México y otros países de América Latina por los tres mil kilómetros de frontera entre nuestras naciones. México denuncia que EUA no hace nada para detener ese tráfico ilícito.
Cientos de toneladas de diversas drogas, marihuana, cocaína, anfetaminas, fentanilo y otras menos conocidas cruzan de sur a norte desde América del sur, Centroamérica y México matando a miles de consumidores anualmente en EUA y Canadá. EUA acusa a México de no combatir a las organizaciones del crimen organizado.
Una mujer embarazada de 19 años murió esta semana a causa de las lesiones sufridas al caer mientras intentaba trepar el muro fronterizo de Estados Unidos cerca de El Paso, Texas. Guatemala identificó a la mujer como nacional de aquel país. El personal médico no logró salvar al bebé. Estados Unidos responsabilizó de la muerte a traficantes de personas. Los migrantes son extorsionados, utilizados y manipulados por estos delincuentes. No se les protege y no se persiguen los delitos en su contra apunta EUA.
Un padre y su menor hijo se ahogaron en el Rio Bravo en Matamoros. La fotografía del triste suceso le dio la vuelta al mundo. Se culpa al gobierno de EUA por el MPP (protocolos de protección al migrante) y se culpa a México por aceptarlos y actuar en los hechos como “waiting room”, exponiendo a los migrantes a ser levantados, a ser extorsionados y sufrir aun más que en sus países de origen.
Historias como estas ocurren a diario en las zonas urbanas de nuestra línea fronteriza. La sociedad resiente estos sucesos y los gobiernos se acusan y culpan mutuamente. Hace unos días, en algún evento en la ciudad de México, el Embajador de Estados Unidos hizo, acertadamente, en mi opinión, un pronunciamiento que apunta a terminar el costoso juego de culpabilidades, y destacando la necesidad de trabajar juntos, con gran cooperación, honesto y limpio intercambio de información altamente estratégica, para consolidar la confianza mutua, combatir responsablemente a la delincuencia en ambos lados, acabar con la corrupción y la impunidad y así caminar juntos hacia la seguridad y paz en nuestras naciones.
Para los que vivimos y trabajamos en frontera, esta es una aspiración constante. Queremos ver a dos naciones en las que autoridades de cada uno de los dos países cumpla con la ley, una zona en la que los negocios, el comercio de bienes, el cruce de personas y la vida diaria transcurra sin balaceras, sin sobresaltos, sin operativos especiales en los puentes, sin muros, sin medidas que entorpezcan el intercambio entre familias, entre empresas, entre gobiernos. Buscamos y queremos emular lo que esta zona fuera no hace mucho.
La diplomacia consular que desplegamos los Consulados de México en Brownsville y de los Estados Unidos en Matamoros, es una pequeña contribución a ese propósito. Pero el decidido involucramiento de los empresarios, los gobernantes y sobre todo de nosotros como sociedad será un factor determinante para eliminar las tragedias como las descritas en las líneas iniciales de esta entrega.
De manera que la corresponsabilidad es la opción. Si participamos en este esfuerzo todos, habremos de lograr una mejora. Comprometernos a este fin debe ser nuestro propósito.
Estamos a tu servicio en el consulado de México. Búscanos y visítanos.
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