Un ataque aéreo israelí alcanza una escuela que alberga a personas en Gaza, matando al menos a 30 personas, incluidos niños.



AP) — Los ataques aéreos israelíes alcanzaron el sábado una escuela utilizada por palestinos desplazados en el centro de Gaza, matando al menos a 30 personas, incluidos varios niños, mientras los negociadores del país se preparaban para reunirse con mediadores internacionales para discutir una propuesta de alto el fuego.

Al menos siete niños y siete mujeres se encontraban entre los muertos que fueron trasladados de la escuela de niñas de Deir al-Balah al Hospital Al Aqsa. El ejército israelí dijo que el ataque tenía como objetivo un centro de mando de Hamás utilizado para dirigir ataques contra tropas israelíes y desarrollar y almacenar “grandes cantidades de armas”. En un comunicado, Hamás calificó de falsa la afirmación de los militares.

Los trabajadores de defensa civil en Gaza dijeron que miles de personas se habían refugiado en la escuela, que también contenía un centro médico.

Los periodistas de Associated Press vieron a un niño muerto en una ambulancia y cuerpos cubiertos con mantas. Dentro de la escuela, las paredes estaban destrozadas y las aulas estaban en ruinas. La gente buscaba víctimas entre los escombros, llenos de almohadas y otros signos de habitabilidad.

El Ministerio de Salud de Gaza dijo que al menos 12 personas murieron en otros ataques el sábado.

Está previsto que funcionarios de Estados Unidos, Egipto, Qatar e Israel se reúnan en Italia el domingo para tratar las negociaciones en curso para un alto el fuego. Se espera que el director de la CIA, Bill Burns, se reúna con el primer ministro qatarí, Mohammed Bin Abdul Rahman al-Thani, el director del Mossad, David Barnea, y el jefe de espionaje egipcio, Abbas Kamel, según funcionarios de Estados Unidos y Egipto que hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a comentar los planes.

El viernes, funcionarios estadounidenses dijeron que Israel y Hamás están de acuerdo sobre el marco básico del acuerdo de tres fases que se está considerando. Sin embargo, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en su discurso ante el Congreso de Estados Unidos, prometió seguir adelante con la guerra hasta que Israel logre una “victoria total”.

Tras el ataque israelí a la escuela, las autoridades palestinas condenaron el discurso. Nabil Abu Rudeineh, portavoz del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, dijo en un comunicado que la recepción que recibió Netanyahu por parte de sus partidarios en Estados Unidos constituía una “luz verde” para continuar la ofensiva israelí.

“Cada vez que la ocupación bombardea una escuela que alberga a personas desplazadas, sólo vemos algunas condenas y denuncias que no obligarán a la ocupación a detener su sangrienta agresión”, afirmó.

Nueva orden de evacuación para parte de la zona humanitaria

El ejército israelí ordenó una nueva evacuación de parte de una zona humanitaria designada en Gaza antes de un ataque planeado sobre Khan Younis el sábado. La orden fue en respuesta al lanzamiento de cohetes que, según Israel, provenían de la zona.

El ejército dijo que planeaba una operación contra militantes de Hamas en la ciudad, incluidas partes de Muwasi, el abarrotado campamento de tiendas de campaña en un área donde Israel ha pedido a miles de palestinos que busquen refugio.

Se trata de la segunda orden de evacuación emitida en una semana que incluye el ataque a parte de la zona humanitaria, un área de 60 kilómetros cuadrados (aproximadamente 20 millas cuadradas) cubierta de campamentos de tiendas de campaña que carecen de instalaciones sanitarias y médicas y tienen un acceso limitado a la ayuda. Israel amplió la zona en mayo para acoger a las personas que huyen de la ciudad más meridional de Rafah, donde se había concentrado más de la mitad de la población de Gaza en ese momento.

Los funcionarios del Ministerio de Salud de Gaza dijeron que las órdenes de evacuación habían obligado a al menos tres centros de salud a dejar de brindar atención y agravado problemas como la acumulación de desechos y la escasez de suministros.

Según estimaciones israelíes, alrededor de 1,8 millones de palestinos se refugian en la zona tras haber sido desalojados varias veces durante la campaña de castigo aérea y terrestre de Israel. En noviembre, el ejército dijo que la zona aún podría ser atacada y que “no era una zona segura, pero es un lugar más seguro que cualquier otro” en Gaza.

La agencia de la ONU para los refugiados palestinos, conocida como UNRWA, dijo que era difícil saber cuántas personas se verían afectadas por la orden de evacuación.

“Se trata de órdenes de desplazamiento forzado”, dijo Juliette Touma, directora de comunicaciones de la agencia. “Lo que ocurre es que cuando las personas reciben estas órdenes, tienen muy poco tiempo para desplazarse”.

Más al norte, los palestinos lloraban a siete personas que habían muerto en los ataques aéreos israelíes durante la noche en Zawaida, en el centro de Gaza. Padres y sus dos hijos y una madre y sus dos hijos estaban envueltos en mortajas blancas mientras amigos y vecinos lloraban.

El Hospital Al Aqsa confirmó el recuento y los periodistas de AP vieron los cuerpos.

Una muerte en Cisjordania

En Cisjordania ocupada, el Ministerio de Salud palestino informó que un joven de 17 años murió y otras nueve personas resultaron heridas tras un ataque con drones israelíes en el campamento de Balata, en Nablus. El ejército israelí dijo que uno de sus aviones atacó desde el aire como parte de su actividad en Nablus.

La guerra en Gaza ha matado a más de 39.200 palestinos, según el Ministerio de Salud, que no hace distinción entre combatientes y civiles en sus recuentos. La ONU estimó en febrero que unos 17.000 niños en el territorio están ahora solos, y es probable que la cifra haya aumentado desde entonces.

La guerra comenzó el 7 de octubre con un ataque de militantes de Hamás al sur de Israel, en el que murieron 1.200 personas, la mayoría civiles, y se tomaron unos 250 rehenes. Unas 115 personas siguen en Gaza y se cree que alrededor de un tercio de ellas están muertas, según las autoridades israelíes.

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Metz informó desde Rabat, Marruecos. El periodista de Associated Press Aamer Madhani en Washington contribuyó a este despacho.

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