“Solo quiero hallar 11, 780 votos”, es la frase que pronunció el presidente Donlad Trump, que esta causando gran controversia en la nación norteamericana pues lo coloca en una conducta que viola leyes federales y estatales, durante una llamada en un descarado abuso de poder.
Trump intentó intimidar a un alto funcionario republicano de Georgia para que buscara votos, a fin de anular la victoria de Joe Biden en el estado.
La asombrosa llamada telefónica, cuyo audio fue obtenido por CNN y reportado por primera vez
David Worley, el miembro de mayor rango de la Junta Electoral del Estado de Georgia, ha confirmado su solicitud al secretario de Estado de Georgia que abriera una investigación sobre su llamada telefónica del 2 de enero con el presidente Donald Trump.
Esto para determinar si ocurrieron violaciones de fraude electoral.
En una carta al secretario de Estado de Georgia y a los funcionarios electorales del estado, Worley escribió que estaba preocupado por el «intento del presidente Trump de manipular los votos de los georgianos». Worley elogió al secretario de Estado, Brad Raffensperger, y al abogado Ryan Germany «por ceñirse a la posición del estado y los hechos simples».
“Nuestro trabajo como miembros de la Junta Electoral del estado es hacer cumplir el Código Electoral de Georgia. Entre nuestras responsabilidades está determinar si probablemente existe una causa para remitir posibles violaciones civiles y penales del Código al fiscal general de Georgia y a los fiscales de distrito locales”, escribió Worley en la carta.
