Texas Tribune.
El fiscal general de Texas, Ken Paxton, anunció el jueves que está demandando a la administración Biden por un programa federal de anticoncepción que brinda anticonceptivos a adolescentes sin requerir el consentimiento de los padres. El programa Title X ha sido durante mucho tiempo la única forma en que los menores de Texas pueden acceder a anticonceptivos confidenciales, pero desde un fallo judicial en 2022 , los proveedores de Texas deben obtener la aprobación de los padres.
Esto es lo que necesitas saber
Antecedentes: el Título X es un programa de la era Nixon que proporciona anticonceptivos confidenciales a cualquier persona, independientemente de sus ingresos, estatus migratorio o edad. Las regulaciones federales y varios fallos judiciales sostienen desde hace tiempo que los proveedores del Título X no pueden exigir a los adolescentes que obtengan el permiso de sus padres para que se les receten anticonceptivos.
En 2020, un padre de Amarillo presentó una demanda por esa disposición, alegando que violaba sus derechos parentales garantizados por la Constitución de Texas. Alexander Deanda estuvo representado por Jonathan Mitchell, ex Procurador General de Texas y activista legal conservador. Mitchell presentó la demanda en un tribunal federal de Amarillo, donde solo un juez conservador, Matthew Kacsmaryk , escucha casi todos los casos.
Kacsmaryk se puso del lado de Deanda y su fallo obligó en la práctica a los proveedores de servicios de salud de Texas a empezar a pedir el consentimiento de los padres para recetar anticonceptivos. El Tribunal de Apelaciones del Quinto Circuito de Estados Unidos confirmó esa decisión en marzo.
En 2021, mientras se desarrollaba este caso, la administración de Biden emitió una nueva norma que enfatiza que los proveedores del Título X “no pueden exigir el consentimiento de los padres o tutores para la prestación de servicios a menores, ni ningún miembro del personal de un proyecto del Título X puede notificar a un padre o tutor antes o después de que un menor haya solicitado y/o recibido servicios de planificación familiar del Título X”.
Por qué Texas presentó la demanda: Paxton argumenta que esta regla “desafía” la sentencia del Quinto Circuito y pide a los tribunales que emitan una orden judicial permanente en su contra.
“Al intentar obligar a los proveedores de atención médica de Texas a ofrecer anticonceptivos a los niños sin el consentimiento de los padres, la Administración Biden sigue demostrando que hará cualquier cosa para implementar su agenda extremista, incluso socavar la Constitución y violar la ley”, dijo Paxton en un comunicado.
Paxton presentó la demanda en un tribunal federal de Amarillo, donde inevitablemente será escuchada por Kacsmaryk, quien anteriormente falló en contra de la cláusula de confidencialidad del programa.
Lo que dicen los proveedores del Título X: Every Body Texas, el administrador estatal del programa del Título X, no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. Pero los proveedores del Título X han sido francos sobre la importancia de la confidencialidad en su trabajo con menores, algunos de los cuales no pueden pedir permiso a sus padres de manera segura para obtener anticonceptivos.
Project Vida, un proveedor de Título X en El Paso, vio una caída del 50% en los adolescentes que piden citas para anticoncepción después de que comenzaron a requerir el consentimiento de los padres, dijo el director médico Dr. Luis Garza a The Texas Tribune en abril.
“Tienen miedo incluso de venir porque creen que sus padres se van a enterar y se están perdiendo muchas cosas por eso”, dijo Garza.
Impacto más amplio: Dado que los proveedores de servicios de salud del Título X en Texas ya exigen el consentimiento de los padres, esta demanda no cambiará el acceso a los anticonceptivos para los adolescentes aquí. Pero es parte de un patrón más amplio de limitación del acceso a la atención de la salud reproductiva en el estado.
La tasa de embarazo adolescente en Texas aumentó por primera vez en décadas después de que el estado prohibiera casi todos los abortos después de aproximadamente seis semanas de embarazo, según los datos de fertilidad de 2022. Ahora, con los abortos prácticamente prohibidos y la anticoncepción aún más limitada, muchos proveedores de atención médica y defensores están preocupados por un nuevo aumento en esas cifras.
Los adolescentes que no pueden obtener el permiso de sus padres para usar métodos anticonceptivos son “los que tienden a ser invisibles para el sistema de atención médica, hasta que aparecen embarazadas o con una ETS”, dijo la Dra. Josephine Porter, directora médica de Tyler Family Circle of Care, al Texas Tribune en abril.
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