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El hombre sospechoso de un aparente intento de asesinato contra Donald Trump acampó afuera de un campo de golf con comida y un rifle durante casi 12 horas, esperando al expresidente antes de que un agente del Servicio Secreto frustrara el posible ataque y abriera fuego, según documentos judiciales presentados el lunes.
Ryan Wesley Routh, de 58 años, enfrenta cargos de posesión de un arma de fuego a pesar de haber sido condenado por un delito grave anteriormente y de posesión de un arma de fuego con un número de serie borrado. El Departamento de Justicia no alegó que hubiera disparado ningún tiro. Es posible que se presenten cargos adicionales y más graves a medida que continúa la investigación y los fiscales buscan una acusación formal por parte de un gran jurado.
Routh compareció brevemente ante un tribunal federal en West Palm Beach, lo que dio inicio a un proceso penal en las últimas semanas de una campaña presidencial ya marcada por la violencia y la agitación. Aunque nadie resultó herido, el episodio marcó el segundo intento de acabar con la vida de Trump en dos meses, lo que planteó nuevas preguntas sobre la seguridad que se le brindaba en un momento de intensa retórica política. Impulsó a los aliados republicanos e incluso a algunos demócratas a exigir que se les explicara cómo un posible tirador pudo acercarse tanto.
Routh fue arrestado el domingo por la tarde después de que las autoridades detectaran un arma de fuego que sobresalía de unos arbustos en el campo de golf de West Palm Beach donde Trump estaba jugando. Fue descubierto por un agente del Servicio Secreto asignado al equipo de seguridad de Trump, quien abrió fuego. Routh se dio a la fuga antes de ser capturado por la policía en un condado vecino, dijeron las autoridades.
Las imágenes de la cámara corporal publicadas el lunes en Facebook por la oficina del sheriff del condado de Martin mostraron el arresto de Routh. El video lo muestra caminando hacia atrás con las manos sobre la cabeza al costado de una carretera antes de que la policía lo esposara y se lo llevara.
Como muestra del nivel de planificación involucrado, se cree que Routh estuvo ubicado en la línea de árboles del campo de golf desde aproximadamente la 1:59 am hasta la 1:31 pm del domingo, según una declaración jurada del FBI que cita datos de un teléfono celular. Una cámara digital, un rifle tipo SKS cargado con una mira y una bolsa de plástico que contenía comida fueron recuperados del área donde Routh había estado parado, según la declaración jurada.
El último intento de asesinato, que se produjo apenas unas semanas después de un tiroteo en julio en un mitin de campaña en Pensilvania en el que Trump resultó herido por una bala de un hombre armado, aceleró las preocupaciones de que la violencia sigue infectando la política presidencial estadounidense. Tanto el presidente Joe Biden como la vicepresidenta Kamala Harris, rival de Trump en las elecciones de noviembre, denunciaron el ataque frustrado, y Harris dijo en una publicación en X: “Me alegro de que esté a salvo. La violencia no tiene cabida en Estados Unidos”.
“Trabajaremos incansablemente para garantizar la rendición de cuentas y utilizaremos todos los recursos disponibles en esta investigación”, dijo el Fiscal General Merrick Garland en un comunicado.
Las autoridades no revelaron de inmediato nuevos detalles sobre los antecedentes de Routh ni alegaron un motivo particular para presentar documentos de acusación. Pero su amplia presencia en línea sugiere que es un hombre con puntos de vista políticos cambiantes, que culminan en un aparente desdén por Trump y una intensa indignación por los acontecimientos mundiales relacionados con China y, especialmente, Ucrania.
“Usted es libre de asesinar a Trump”, escribió Routh sobre Irán en un libro aparentemente autoeditado en 2023 titulado “La guerra imposible de ganar de Ucrania”, que describió al expresidente como un “tonto” y un “bufón” tanto por los disturbios del Capitolio del 6 de enero de 2021 como por el “tremendo error” de abandonar el acuerdo nuclear con Irán.
Routh escribió que una vez votó por Trump y debe asumir parte de la culpa por el “niño que elegimos para nuestro próximo presidente que terminó sin cerebro”.
También intentó reclutar combatientes para Ucrania para defenderse de Rusia y tenía un sitio web que buscaba recaudar dinero y reclutar voluntarios para luchar por Kiev.
Los registros electorales muestran que se registró como votante no afiliado en Carolina del Norte en 2012, y más recientemente votó en persona durante las primarias demócratas del estado en marzo.
Routh también hizo 19 pequeñas donaciones por un total de $140 desde 2019 a ActBlue, un comité de acción política que apoya a los candidatos demócratas, según los registros federales de financiamiento de campañas.
Uno de los dos cargos que enfrenta alega que poseía ilegalmente su arma a pesar de múltiples condenas por delitos graves, incluidos dos cargos de posesión de bienes robados en 2002 en Carolina del Norte. El otro cargo alega que el número de serie fue borrado y era ilegible a simple vista, en violación de la ley federal.
Se ordenó la detención de Routh después de que los fiscales argumentaran que existía riesgo de fuga, y se fijaron audiencias adicionales para finales de este mes.
Routh habló en voz baja mientras respondía a las preguntas superficiales de un magistrado federal, diciendo que estaba trabajando y ganando alrededor de 3.000 dólares al mes, pero que no tenía ahorros. Routh dijo que no tenía bienes inmuebles ni activos, aparte de dos camiones valorados en unos 1.000 dólares, ambos ubicados en Hawai. También dijo que tenía un hijo de 25 años, al que a veces ayudaba.
El arresto volvió a centrar la atención en los desafíos de proteger a Trump, el candidato presidencial republicano, no sólo durante los eventos de campaña sino también cuando no está en campaña, a menudo en sus propios clubes y propiedades.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, uno de los rivales de Trump en las primarias republicanas, dijo que su estado realizará su propia investigación sobre cómo Routh pudo llegar tan cerca.
El sheriff del condado de Palm Beach, Ric Bradshaw, señaló en una reunión informativa que debido a que Trump ya no está en el cargo, los protocolos de seguridad en el campo se habían relajado.
“Él no es el presidente en funciones. Si lo fuera, habríamos rodeado todo este campo de golf. Pero como no lo es, su seguridad se limita a las zonas que el Servicio Secreto considera posibles”, dijo a los periodistas.
El 13 de julio, una bala rozó la oreja de Trump después de que un hombre armado de 20 años logró acceder a un techo sin seguridad durante un mitin en Butler, Pensilvania.
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Tucker, Durkin Richer y Long informaron desde Washingto
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