EFE.
Algunos de los potenciales rivales republicanos de Donald Trump en los comicios de 2024 reforzaron este sábado sus respectivas candidaturas en un encuentro que coincidió con el anuncio del exmandatario estadounidense de que se enfrenta a un arresto inminente.
La cita fue convocada en Carolina del Sur por la organización Palmetto Family, defensora de los valores tradicionales, y contó, entre otras, con la exembajadora de Estados Unidos en la ONU, Nikki Haley, y el empresario Vivek Ramaswamy, que ya confirmaron sus intenciones electorales; con el exgobernador de Arkanas Asa Hutchinson, y el senador Tim Scott, que sopesan presentarse.
En la agenda, la situación en la frontera sur, la crisis provocada por el consumo de fentanilo y la educación sobre identidad de género en las escuelas, con la posibilidad de que Trump sea arrestado como telón de fondo.
El expresidente republicano (2017-2021), que aseguró este sábado que será detenido el martes e instó a la ciudadanía a protestar para “recuperar” el país, está investigado por la Fiscalía de Nueva York por el pago de dinero a la estrella de cine porno Stormy Daniels para supuestamente silenciar una relación sexual.
“No deberíamos elegir a un candidato sólo porque sea cristiano o conservador. Debemos asegurarnos de que no es alguien que destroza nuestro país”, dijo Hutchinson en un llamamiento especial a la comunidad evangélica, a la que pertenece.
Mientras comparecencias como la de Haley se centraron en su propia agenda, subrayando, entre otros puntos, que hay dar a los cárteles mexicanos el mismo tratamiento que al grupo yihadista Estado Islámico, la de Ramaswamy fue directa a ese “elefante en la habitación” para criticar, en cambio, al partido en el poder por “usar la fuerza policial para arrestar a un opositor”.
Desde el ala más conservadora de los republicanos, el apoyo a Trump también se hizo público.
“El fiscal de Nueva York ha hecho más por ayudarle a ser elegido presidente que cualquier otra persona en Estados Unidos hoy. Se están inventando cosas que nunca han usado contra nadie más. ¿Esto es lo más importante que está pasando en Manhattan? Es un intento para destruirlo a él y a todo lo que le rodea”, dijo el senador Lindsey Graham en ese encuentro.
En Twitter se pronunciaron, por otra parte, legisladores como el líder de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, que denunció que el posible arresto es un “vergonzoso abuso de poder por parte de un fiscal radical” que busca una “venganza política”.
“Esto es lo que hacen en países comunistas para destruir a sus opositores políticos”, añadió Marjorie Taylor Greene, mientras que el también integrante de la Cámara Baja Matt Gaetz apuntó que debe verse como “la patética trama partidista que es”.
Trump prevé celebrar su primer gran mitin electoral el próximo fin de semana en Texas y este sábado no paró de reiterar sus llamamientos a la protesta: “Nuestros enemigos están intentando intimidarme. Pero este es mi mensaje para ellos: ‘No me rendiré nunca’”, dijo alegando que el bando contrario está intentando “matar” al país.
El que fuera su vicepresidente, Mike Pence, añadió que, como muchos estadounidenses, está “desconcertado” por la noticia de la eventual detención.
“Con una ola gigante de delincuencia en Nueva York y un Partido Republicano que literalmente ha desmantelado el sistema judicial penal en esa ciudad, ¿eso es lo que la Fiscalía de Manhattan considera prioritario?”, criticó.
Desde la Administración demócrata se pronunció en un comunicado la expresidenta de la Cámara Baja Nancy Pelosi para subrayar que “nadie está por encima de la ley” y alegar que el anuncio de Trump es “imprudente” y fomenta la agitación entre sus seguidores.