El delegado federal de programas sociales, Juan Carlos Loera de la Rosa, fue retenido el martes 9 de junio, en la presidencia municipal de Ojinaga por un centenar de agricultores de la región inconformes por la extracción de agua de la presa El Granero, en cumplimiento del tratado de 1944 entre México y Estados Unidos.
Alrededor de las 3 de la tarde, el delegado federal resultó agredido física y verbalmente por los enfurecidos agricultores, quienes exigían el cierre de la presa.
Entre gritos y reclamos, el delegado intentó abandonar la presidencia municipal luego de romperse el diálogo que terminó en insultos por parte de los agricultores quienes impidieron la retirada del delegado quien fue obligado a regresar al interior de la presidencia.
Ya entrada la noche, frente a la presidencia municipal de Ojinaga fueron incendiadas tres camionetas pick up que previamente fueron vandalizadas y volteadas por los productores. Uno de los vehículos era del delegado Loera de la Rosa, otro más en el que se transportaba Pedro Torres, vocero Juan Carlos Loera y de los programas de Bienestar, y la tercer camioneta perteneciente a la delegada regional en Ojinaga, Elisa Franco.
Norte Digital logró establecer comunicación con Pedro Torres, responsable de Comunicación Social del delegado Juan Carlos Loera, y confirmó la situación de grave tensión así como el hecho de que el delegado Loera de la Rosa se encontraba en estos momentos, casi a la medianoche, aún retenido, siete horas después de haber estallado el conflicto.
Por su parte Pedro Torres y otros colaboradores se encontraban resguardados en un lugar de Ojinaga en espera de una solución para la liberación del delegado Loera de la Rosa.
Por su parte el diputado juarense Benjamín Carrera, explicó a este medio que Juan Carlos se encontraba bien, y reprochó al gobierno del estado por la falta de seguridad en torno al delegado federal.
“Es la autoridad estatal la responsable de brindar la seguridad y no lo hizo”, dijo Carrera.
Asimismo trascendió que los mismos agricultores cortaron el suministro de luz a la presidencia municipal donde se encontraba retenido el delegado.
Por otro lado, través de un comunicado, el Consejo Estatal de Morena reprobó los actos violentos ocurridos en Ojinaga.
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