En las últimas semanas, nuestro estado ha pedido mucho de los Tejanos mientras este se esfuerza por detener el contagio de COVID-19. El gobernador de Texas, Greg Abbott, y el comisionado del Departamento de Servicios de Salud del Estado de Texas, John Hellerstedt, han solicitado a través de sus órdenes de salud pública que todos los Tejanos permanezcan en sus hogares tanto como sea posible, a menos de que estén involucrados en un servicio esencial o necesiten participar en actividades esenciales, como ir a la farmacia o al supermercado. Con el propósito de frenar la curva de los pacientes con COVID-19 cuando están en público, se le ha pedido a la comunidad que practiquen el distanciamiento social y que mantengan una buena higiene.
Es inspirador ver a tantos Tejanos elevar los estándares y cumplir con lo que los líderes estatales les han solicitado para ayudar a mantener a nuestras familias, amigos y vecinos con buena salud. Desafortunadamente, seguir estas órdenes promulgadas de abstenerse de actividades no esenciales les ha afectado a muchos. Lamentablemente, por ejemplo, ha provocado que miles de empresas “no esenciales” cierren sus puertas, lo que resultado en despidos masivos. Como resultado, los trabajadores desplazados han perdido el seguro medico que tenían por medio de sus trabajos, lo que los orilla a tener que valerse por sí mismos para mantenerse con salud y cuidar de sus familias. Estas son algunas de las consecuencias que se han experimentado debido a las medidas para poder salvaguardar el sistema de salud pública de Texas de ser abrumado por la pandemia.
Afortunadamente, el gobierno federal ha dado un paso adelante para ayudar a proporcionar beneficios de desempleo a través de la Ley federal CARES Act a aquellos afectados negativamente por esta crisis de salud pública. La gran cantidad de despidos ha creado un número récord en reclamos por desempleo y ha creado una acumulación de solicitudes para procesar. Como informaron los medios de comunicación, muchos Tejanos que prestan servicios críticos están ganando salarios bajos y están luchando por conservar sus trabajos sin tener seguro médico. Sabiendo que antes del brote de COVID-19, Texas tenía la tasa más alta de residentes sin seguro en la nación, es razonable prever que la gran cantidad de trabajadores desplazados probablemente también causará embotellamientos similares para los servicios de atención médica en nuestro sistema de salud pública. Desafortunadamente, debido a que los Tejanos despedidos también perdieron su seguro medico que tenían por medio de sus empleos, muchos se verán obligados a depender de nuestros hospitales y salas de emergencias cuando se enfermen. Como resultado, miles de Tejanos desempleados que carecen de cobertura medica probablemente presionen al mismo sistema de atención médica que promulgó las órdenes de salud pública destinadas a proteger.
Al igual que nuestro gobierno federal se elevó por encima de las ideologías divisivas para apoyar a los estadounidenses que necesitan ayuda con la Ley federal CARES Act, los Tejanos desplazados y trabajadores de bajos recursos también necesitan que el Estado de Texas los ayude durante el brote de COVID-19 proporcionándoles un aumento de oportunidades para una cobertura medica a buen precio.
Es por eso que los Tejanos desempleados, y sus familias, le están pidiendo al único funcionario electo a nivel estatal que cuenta con la autoridad ejecutiva para aumentar las oportunidades de atención médica mediante la expansión de la cobertura de Medicaid en Texas. Es por eso que, con el mejor interés de nuestros electores, trabajadores desplazados y trabajadores de bajos recurso, imploro respetuosamente al gobernador Abbott que responda a la petición de nuestros electores y disminuya el impacto devastador de COVID-19 para los Tejanos sin seguro medico expandiendo la cobertura de Medicaid en el Estado de Texas.
Como informaron los medios de comunicación y diferentes estudios, la expansión de Medicaid en nuestro estado permitiría a Texas disponer de aproximadamente $100 mil millones en fondos federales durante la década. Esta expansión también ayudaría a ahorrar aproximadamente $5.5 mil millones al año en atención médica no compensada del hospital, visitas a la sala de emergencias de personas sin seguro medico. El aumento en las oportunidades de recibir cobertura médica y el aprovechamiento de fondos federales pueden suceder si Texas invierte en el bienestar de la columna vertebral de nuestra economía estatal, nuestros Tejanos. Para proteger nuestro sistema de salud pública y ayudar a que Texas esté abierto a los negocios, con el mayor respeto, reitero mi solicitud al gobernador Abbott para que siga apoyando a nuestros electores y coloque a Texas en el lugar adecuado para que el aumento en oportunidades de seguro medico mediante la expansión de Medicaid en nuestro estado.
Lo que la pandemia de COVID-19 nos ha enseñado es que ahora es el momento de actuar. Los Tejanos necesitados pueden recibir ayuda para mantenerse saludables y no inundar nuestras salas de emergencia con visitas de atención médica prevenibles si nuestro estado invierte en su bienestar al brindarles oportunidades de seguro medico accesible mediante la ampliación de cobertura de Medicaid en Texas ahora.
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El senador Eddie Lucio, Jr. (D – Brownsville) representa a los condados de Cameron, Hidalgo, Kenedy, Kleberg y Willacy. Es el presidente del Comité de Relaciones Intergubernamentales del Senado; vicepresidente del Comité de Educación del Senado; Miembro de los Comités del Senado sobre Asuntos del Estado; Asuntos de Veteranos y Seguridad Fronteriza; y de los Comités Selectos de Redistribución de Distritos; y los puertos de Texas. Es miembro de la Comisión Asesora Sunset y ha sido miembro de oficio de la Fuerza de Tarea DSHS de Oficiales de Salud Pública Fronteriza desde 2017. Elegido en 1991, Lucio es el tercero en antigüedad en el Senado de Texas.
