A partir de este viernes, la Unión de Funerarios de Ciudad Juárez decidió suspender sus servicios, debido a la acumulación de cuerpos en sus instalaciones y en los hospitales General y General Regional 66 del IMSS, hasta en tanto el Gobierno del estado ofrezca una solución.
El dirigente de la unión, Marcelo Ruiz Cantú dio a conocer durante una protesta en las oficinas de la Comisión Estatal para la Protección de Riesgos Sanitarios (Coespris), que en el IMSS 66 se encuentran 50 cuerpos “atorados”, además de 80 más en funerarias.
El dirigente atribuyó el hecho a la tardanza de los trámites para la disposición sanitaria de los cadáveres, al cierre “ilegal” del panteón municipal San Rafael para este tipo de inhumaciones y al endurecimiento de las inspecciones de Coespris.
En un comunicado, la Dirección de Servicios Municipales expuso que cumplen con un decreto federal y estatal en el que se expresa la prohibición de inhumaciones por este nuevo virus.
Aunque la Secretaría de Salud del Gobierno Federal, no tiene una prohibición de inhumaciones de es tipo y sólo tiene la Guía de Manejo de Cadáveres por COVID -19 (SARS-CoV-2) México, emite recomendaciones y no restricciones legales.
El Gobierno municipal emitió un boletín de prensa, en el que el alcalde independiente, Armando Cabada, dijo que buscará que Servicios Públicos se ponga en contacto con la unión y autoridades de Coespris para buscar una solución.
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