Autoridades en ambos lados de esta región fronteriza están promoviendo en la comunidad que la noche del 31 de diciembre no se disparen armas de fuego, como ha sido costumbre desde hace muchos años.
“Los disparos de celebración son ilegales y peligrosos. No dispares, todo lo que sube tiene que bajar. Celebra el nuevo año 2019 de forma segura”, indica un mensaje difundido por el Departamento de Policía de la ciudad de Brownsville.
En Matamoros, el gobierno municipal que encabeza Mario Alberto López Hernández también activó una campaña para pedir que la noche del fin de año haya “Abrazos, no balazos”.
Estos mensajes han sido necesarios debido a que, por décadas, las familias fronterizas han visto ensombrecidas sus celebraciones de año nuevo por la detonación de armas de fuego que algunas personas acostumbran hacer como tradición cuando dan las 12 de la noche.
Dicha costumbre ha causado en años anteriores víctimas que han sufrido lesiones desde leves hasta otras que les causan la pérdida de movilidad o de algún órgano, pero también historias fatales de muertes inocentes.
Debido a lo anterior, las autoridades están advirtiendo que habrá vigilancia policial y quien sea sorprendido disparando armas de fuego será detenido, para afrontar los cargos que correspondan.
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