Por Fidel Pérez
Entre la algarabía de gritos de “¡no estás sola, no estás sola!”, y “¡presidenta, presidenta!”, la senadora Xóchitl Galvez advirtió este sábado en el puerto de Veracruz que demandará penalmente al presidente Andrés Manuel López Obrador porque “se pasó de lanza”.
No faltó el “sí se puede, sí se puede”, y la respuesta inmediata de la panista: “¡Claro que se puede! (…) Sé que voy arriba, pero cállense, no lo hablen fuerte”, para luego arremeter nuevamente contra el presidente: “Él no admite a los aspiracionistas, pero yo sí, y le digo que soy empresaria y empecé muy joven haciendo hasta 600 gelatinas y tamales”.
Gálvez llegó puntual a su cita en un conocido hotel del boulevard del puerto de Veracruz. Antes de iniciar su encuentro con panistas, empresarios y dueños de medios de comunicación, platicó que la inseguridad en el país es un desastre.
“Yo no estoy para dar abrazos, yo sí voy a aplicar la ley”, sentenció, pero rechazó detallar su propuesta en torno de las estrategias para acabar con las bandas delincuenciales, aunque recriminó que hoy sumen más de 160 mil homicidios en el país.
Reiteró que va a demandar penalmente al presidente López Obrador porque hizo pública información confidencial de sus clientes, violando el código fiscal. “Él no tiene derecho a tener acceso al SAT, él le pidió al SAT que le mandara una relación de mis clientes y eso es secreto fiscal, abuso de autoridad”.
Ya en la charla, Gálvez rechazó formar parte de la oligarquía por haber sido titular de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas durante el gobierno de Vicente Fox y punzó: “Fui funcionaria porque soy chingona”.
Por ello, dijo que tres de sus ideales como empresaria y funcionaria federal son mantener la filosofía de “no mentir, no ser huevón y no ser pendejo”, lo que provocó aplausos, y las risas de la hidalguense resonaron en el salón del hotel.
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