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Los suicidios en las fuerzas armadas de Estados Unidos aumentaron en 2023, lo que continúa una tendencia de largo plazo que el Pentágono ha luchado por frenar, según un informe del Departamento de Defensa publicado el jueves. El aumento es un pequeño revés después de que las muertes disminuyeron ligeramente el año anterior.
El número de suicidios y la tasa por cada 100.000 miembros del servicio activo aumentaron, pero el aumento no fue estadísticamente significativo. La cifra también aumentó entre los miembros de la reserva, mientras que disminuyó un poco en la Guardia Nacional.
El secretario de Defensa, Lloyd Austin, ha declarado que el tema es una prioridad, y los principales líderes del Departamento de Defensa y de todos los servicios han trabajado para desarrollar programas que aumenten la asistencia en materia de salud mental para las tropas y refuercen la educación sobre seguridad de las armas, cerraduras y almacenamiento. Sin embargo, muchos de los programas aún no se han implementado por completo, y las medidas no están a la altura de las medidas de seguridad de armas más drásticas recomendadas por una comisión independiente.
En un comunicado emitido el jueves, Austin dijo que las nuevas cifras “demuestran urgentemente la necesidad de que el Departamento redoble su trabajo en los complejos campos de la prevención y la posvención del suicidio”. Dijo que el departamento está actuando con urgencia para implementar cambios y agregó: “Todavía hay mucho más trabajo por hacer y no vamos a cejar”.
El aumento fue impulsado por picos en el número de muertes en el Ejército y la Fuerza Aérea, mientras que el Cuerpo de Marines y la Marina vieron una caída muy pequeña.
En total, en 2023 se denunciaron 523 suicidios, frente a los 493 de 2022. El número de soldados en servicio activo que murieron por suicidio aumentó de 331 a 363.
Los funcionarios han dicho que debido a la disminución del tamaño de la fuerza en servicio activo en los últimos años, creen que la tasa de suicidios, en lugar del número, es una medida más precisa. La tasa de suicidios se calcula sobre la base de una fuerza en servicio activo de aproximadamente 1,28 millones, aproximadamente 330.000 reservistas y casi 430.000 en la Guardia. La tasa de miembros del servicio activo y de la reserva aumentó, mientras que en la Guardia fue menor.
Sin embargo, en términos más generales, la tendencia desde 2011 ha sido un aumento de los suicidios entre los miembros del servicio activo, mientras que la Guardia y la Reserva se han mantenido en gran medida estables. Los funcionarios dijeron que las estadísticas generalmente reflejan las tasas de suicidio de la sociedad en su conjunto, cuando se ajustan por edad y género, porque la mayoría de los miembros del servicio militar son jóvenes y varones.
El análisis del informe anual también muestra que se mantienen las tendencias en cuanto a las personas que se suicidan y cómo lo hacen. El informe muestra que los soldados jóvenes y varones siguen constituyendo la gran mayoría de los suicidios y que la mayor parte de las muertes se deben al uso de armas de fuego.
Los datos sobre suicidios de familiares de soldados están un año por detrás, pero muestran que en 2022 se suicidaron menos miembros de la familia que el año anterior, con una disminución del 9% en la tasa. Si bien hay muchos menos cónyuges varones, representan casi la mitad de las muertes por suicidio.
Un comité independiente recomendó a principios del año pasado que el departamento implementara una serie de medidas de seguridad de armas para reducir los suicidios en la fuerza, incluidos períodos de espera para la compra de armas de fuego y municiones por parte de los miembros del servicio en propiedades militares.
La comisión dijo que el departamento debería elevar a 25 años la edad mínima para que los miembros de las fuerzas armadas puedan comprar armas y municiones y exigir que todos los que vivan en viviendas militares registren todas las armas de fuego de propiedad privada. Además, dijo que el departamento debería restringir la posesión y el almacenamiento de armas de fuego de propiedad privada en cuarteles y dormitorios militares.
En respuesta a ese informe, Austin lanzó una nueva campaña para abordar los suicidios en la fuerza, pero el departamento decidió no implementar los cambios clave en las armas de fuego sugeridos por la comisión. En cambio, el Pentágono dijo que “incentivaría” el almacenamiento seguro de armas de fuego, proporcionaría más lugares de almacenamiento y realizaría más educación pública sobre cómo almacenar armas de manera segura, similares a las medidas que los funcionarios han mencionado en el pasado.
Los funcionarios de defensa dijeron que esos cambios, que podrían incluir la entrega de un vale a las tropas para sufragar algunos de los costos de las cerraduras y el almacenamiento de las armas, están en proceso, pero aún no se han concretado. Todavía están trabajando en la modernización de los programas de capacitación para instruir mejor a las tropas sobre el almacenamiento y uso seguro de las armas y para reducir el estigma de buscar apoyo en materia de salud mental.
Además, los servicios militares están contratando personal para dotar de personal a los programas de prevención y, a fecha de este verano, se han contratado a unos 1.000 profesionales con el objetivo de llegar a 2.500 en 2028.
___ La línea nacional de ayuda para casos de suicidio y crisis está disponible llamando o enviando un mensaje de texto al 988. También hay un chat en línea en 988lifeline.org.
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