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El esfuerzo del gobierno de Trump para reducir el tamaño de la fuerza laboral federal llegó a la Administración de Alimentos y Medicamentos este fin de semana, ya que empleados recientemente contratados que revisan la seguridad de los ingredientes alimentarios, dispositivos médicos y otros productos fueron despedidos.
Los empleados en período de prueba de la FDA recibieron avisos el sábado por la noche de que sus puestos de trabajo iban a ser eliminados, según tres empleados de la FDA que hablaron con The Associated Press bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a hablar públicamente.
El domingo no se supo con certeza el número total de puestos eliminados, pero los despidos parecieron centrarse en empleados de los centros de alimentos, dispositivos médicos y productos de tabaco de la agencia, que incluyen la supervisión de los cigarrillos electrónicos. No quedó claro si los empleados de la FDA que revisan medicamentos estaban exentos de los despidos.
El viernes, el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU. anunció planes para despedir a 5.200 empleados en período de prueba en sus agencias, que incluyen los Institutos Nacionales de Salud, la FDA y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Las personas que hablaron con la AP bajo condición de anonimato el viernes dijeron que el número de empleados en período de prueba que serán despedidos en el CDC ascendería a casi 1.300. Pero hasta las primeras horas de la tarde del domingo, unas 700 personas habían recibido notificaciones, según tres personas que hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizadas a hablar públicamente. Dijeron que ninguno de los despidos del CDC afectó a los jóvenes médicos e investigadores que rastrean las enfermedades en lo que se conoce como el Servicio de Inteligencia Epidémica.
La FDA tiene su sede en los suburbios de Maryland, en las afueras de Washington, y emplea a casi 20.000 personas. Desde hace tiempo ha sido el blanco de las críticas del recién juramentado secretario de Salud, Robert Kennedy Jr., quien el año pasado acusó a la agencia de librar una “guerra contra la salud pública” por no aprobar tratamientos no probados, como los psicodélicos, las células madre y la terapia de quelación.
Kennedy también ha pedido que se eliminen miles de sustancias químicas y colorantes de los alimentos estadounidenses. Pero los recortes en la FDA incluyen al personal responsable de revisar la seguridad de los nuevos aditivos e ingredientes alimentarios, según un miembro del personal de la FDA familiarizado con los despidos.
Un portavoz del HHS no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios el domingo por la tarde.
Casi la mitad del presupuesto de 6.900 millones de dólares de la FDA proviene de las tasas que pagan las empresas que regula la agencia, incluidos los fabricantes de medicamentos y dispositivos médicos, lo que le permite contratar científicos adicionales para revisar rápidamente los productos. La eliminación de esos puestos no reducirá el gasto público.
Un ex funcionario de la FDA dijo que recortar las contrataciones recientes podría ser contraproducente, eliminando a empleados que tienden a ser más jóvenes y tienen habilidades técnicas más actualizadas. La fuerza laboral de la FDA se inclina hacia trabajadores mayores que han pasado una o dos décadas en la agencia, y la Oficina de Responsabilidad Gubernamental señaló en 2022 que la FDA “históricamente ha enfrentado desafíos para reclutar y retener” personal debido a un mejor dinero en el sector privado.
“Lo que se busca es atraer a gente nueva”, dijo Peter Pitts, ex comisionado asociado de la FDA durante la presidencia de George W. Bush. “Se busca gente con nuevas ideas, mayor entusiasmo y las últimas novedades en materia de tecnología”.
Mitch Zeller, ex director de tabaco de la FDA, dijo que los despidos son una forma de “desmoralizar y socavar el espíritu de la fuerza laboral federal”.
“El efecto combinado de lo que están tratando de hacer va a destruir la capacidad de reclutar y retener talento”, dijo Zeller.
El equipo de inspección de la FDA se ha visto particularmente sobrecargado en los últimos años tras una ola de salidas durante la pandemia de COVID-19, y muchos de los inspectores actuales de la agencia son contrataciones recientes. No quedó claro de inmediato si esos empleados estaban exentos.
Los inspectores de la FDA son responsables de supervisar miles de instalaciones de alimentos, medicamentos, tabaco y dispositivos médicos en todo el mundo, aunque AP informó el año pasado que la agencia enfrentaba una acumulación de aproximadamente 2.000 instalaciones de medicamentos no inspeccionadas que no habían sido visitadas desde antes de la pandemia.
El equipo de inspección de la agencia también ha sido criticado por no actuar con mayor rapidez para detectar problemas recientes relacionados con fórmulas infantiles, alimentos para bebés y gotas para los ojos.
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El redactor médico de AP Mike Stobbe contribuyó a este informe.
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