The Independent.
Mientras el huracán Ian azotaba las comunidades costeras del suroeste de Florida, los residentes de este tranquilo suburbio pensaban que estarían a salvo, lejos de las playas y fuera de las zonas bajo órdenes de evacuación. Pero los niveles del agua siguieron subiendo.
Desde el paso de Ian, los niveles del agua han aumentado considerablemente, convirtiendo caminos en canales, llegando hasta los buzones, inundando camionetas y camiones, bloqueando el acceso principal a una autopista interestatal, y dejando a las familias atrapadas en casas anegadas. Ahora, a medida que transcurren los días, los residentes en North Point, un suburbio de Sarasota, comienzan a quedarse sin agua ni comida.
“El agua sigue subiendo. Quién sabe cuándo se vaya a detener”, dijo Samuel Almanzar, de 42 años. Fue rescatado por cuadrillas de emergencia el viernes junto a su padre, su esposa y sus dos hijos, de 11 y 6 años.
Una vez que concluyeron las labores de rescate el viernes, las autoridades locales les recomendaron a los residentes de vecindarios inundados que evacúen. Dijeron que en algunas zonas las aguas continuarán subiendo durante los próximos dos días.
Las inundaciones en North Point demuestran que el impacto de Ian no se limitó a las playas y localidades turísticas. Las fuertes lluvias de la tormenta han resultado en la inundación de comunidades suburbanas en el interior del estado que no recibieron avisos de huracán.
Los causantes son las crecidas de los ríos a causa de los diluvios del huracán, que sigue causando estragos mucho después de que pasaron los vientos. Y eso ha desatado operaciones de rescate similares a las que se ven en las comunidades costeras.
Se reportaron inundaciones en toda la franja central del estado: Alrededor de Orlando y sus parques de diversiones, al sur hacia Kissimmee, al este hacia Daytona Beach. Las personas que viven cerca de los ríos resultaron sumamente afectadas.
Cerca de North Point, el Departamento de Transporte de Florida cerró un tramo de la autopista interestatal 75 en ambas direcciones la noche del viernes debido a un desborde del río Myakka.
Decenas de elementos de la Guardia Nacional llegaron horas antes el viernes a North Point, que se ubica unos 140 kilómetros (85 millas) al sur de Tampa, para acelerar las labores que comenzaron los bomberos de otros estados y condados el miércoles. Y las autoridades de la ciudad se apresuraban a abrir un centro de evacuación en una escuela secundaria del lugar.
___
Anderson reportó desde St. Petersburg, Florida.
.