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El IRS despedirá a miles de trabajadores en período de prueba en medio de la temporada de impuestos, según dos fuentes familiarizadas con los planes de la agencia, y los recortes podrían ocurrir tan pronto como la próxima semana.
Esto ocurre mientras la administración Trump intensifica sus amplios esfuerzos para reducir el tamaño de la fuerza laboral federal, al ordenar a las agencias que despidan a casi todos los empleados en período de prueba que aún no hayan obtenido la protección del servicio civil.
No está claro cuántos trabajadores del IRS se verán afectados.
Anteriormente, la administración anunció un plan para ofrecer indemnizaciones a casi todos los empleados federales a través de un “programa de renuncia diferida” para reducir rápidamente la fuerza laboral del gobierno. La fecha límite del programa era el 6 de febrero, y los funcionarios de la administración dijeron que los empleados que acepten podrán dejar de trabajar y seguir cobrando su salario hasta el 30 de septiembre.
Sin embargo, a los empleados del IRS involucrados en la temporada de impuestos de 2025 se les dijo que no se les permitirá aceptar una oferta de compra de la administración Trump hasta después de la fecha límite de presentación de impuestos del contribuyente, según una carta enviada recientemente a los empleados del IRS.
No está claro cuántos trabajadores se verán afectados por el anuncio de despidos. Representantes del Tesoro de Estados Unidos y del IRS no respondieron a las solicitudes de comentarios de Associated Press.
El 27 de enero fue la fecha oficial de inicio de la temporada de impuestos de 2025, y el IRS espera que se presenten más de 140 millones de declaraciones de impuestos antes de la fecha límite del 15 de abril. La administración Biden invirtió mucho en el IRS a través de una inyección de fondos de 80 mil millones de dólares en la Ley de Reducción de la Inflación de los demócratas, que incluía planes para contratar a decenas de miles de nuevos empleados para ayudar con el servicio al cliente y la aplicación de la ley, así como nueva tecnología para actualizar la agencia de recaudación de impuestos.
Los republicanos han tenido éxito en recuperar ese dinero, y el multimillonario Elon Musk y su Departamento de Eficiencia Gubernamental han pedido que Estados Unidos “elimine agencias enteras” del gobierno federal como parte de su plan para recortar radicalmente el gasto y reestructurar sus prioridades.
Los funcionarios electos están intentando luchar contra los planes de DOGE. Los fiscales generales de 14 estados desafiaron la autoridad de acceder a datos gubernamentales confidenciales y ejercer un “poder prácticamente sin control” en una demanda presentada el jueves.
La demanda, presentada en un tribunal federal de Washington, dice que las acciones que Musk toma al frente de DOGE solo pueden ser tomadas por un funcionario designado y confirmado por el Senado. Cita disposiciones constitucionales que delimitan los poderes del Congreso y del presidente.
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