Por Jesús Padilla/Corresponsal
Un policía más fue asesinado en Guanajuato, entidad en la que 51 agentes de las fuerzas de seguridad han muerto en ataques de la delincuencia en lo que va del año.
La víctima más reciente fue un policía municipal de Tarimoro, quien sufrió el ataque de un grupo armado que irrumpió en su vivienda mientras descansaba.
Informes de la policía municipal detallan que el agente Carlos Martínez fue asesinado de siete disparos cuando se encontraba en el baño de la segunda planta de su casa, ubicada en la calle Pípila, en la zona Centro de esa comunidad, la noche del lunes.
Los atacantes escaparon sin que hasta el momento haya detenidos, aunque la fiscalía del estado destinó un grupo especial para esclarecer este asesinato y el de otro agente de Celaya registrado ayer.
El lunes, un agente de la Policía Vial fue asesinado en Celaya cuando trataba de refugiarse en la comandancia norte.
En Tarimoro ya son cinco ataques a elementos de policía, el más reciente ocurrió el pasado 5 julio cuando un agente fue ejecutado en un auto lavado junto a un trabajador de ese negocio.
En otro hecho de violencia registrado en el estado, este martes se halló una camioneta con cinco cuerpos en el municipio de Valle de Santiago.
Las autoridades municipales recibieron el reporte sobre una camioneta Jeep Liberty color rojo volcada sobre un canal de agua ubicado cerca de la carretera que conecta a Valle de Santiago con el municipio de Jaral del Progreso.
Al atender el reporte, autoridades encontraron cinco cuerpos dentro del vehículo, cuatro mujeres y un hombre. Todos presentaban signos de tortura e impactos de bala.
Integrantes del Ejército, de la Guardia Nacional y de la Fiscalía General de Guanajuato resguardaron la zona, que forma parte de la región conocida como Laja-Bajío, la más violenta de la entidad.
Las autoridades no compartieron información sobre el móvil del crimen ni de los sospechosos.
Con información de EFE.
