Washington, EU.- La Agencia de Protección Ambiental anuló una serie de protecciones aplicadas por el gobierno de Barack Obama para regular un contaminante en el agua potable que es vinculado con daño cerebral en bebés.
La agencia, conocida como EPA por sus siglas en inglés, rechazó denuncias de que la decisión representará un menor coeficiente intelectual en recién nacidos.
El anuncio del director Andrew Wheeler fue la más reciente de una serie de medidas por del gobierno de Donald Trump para eliminar protecciones sanitarias y ambientales, particularmente las iniciativas de Obama. El gobierno de Trump afirma que las reglamentaciones representan una carga para los negocios y eran innecesarias.
En un comunicado, Wheeler dijo que la decisión de eliminar la incorporación de límites federales al perclorato, un componente presente en el combustible de cohetes, en municiones y explosivos, “cumple la promesa del presidente Trump de reducir molestos controles exagerados ´iguales para todos´ para el pueblo estadounidense”.
El perclorato contamina el agua potable que consumen hasta 16 millones de estadounidenses, subrayó el gobierno de Obama en 2011 al anunciar que la EPA establecería límites máximos de perclorato por primera vez.
El perclorato puede causar daños en el desarrollo del feto y niños y causar un declive perceptible en el coeficiente intelectual de recién nacidos, explicó la Academia Estadounidense de Pediatría en agosto del año pasado al exhortar a implementar los límites federales “más severos posibles”. Entre los estudios citados por el grupo de médicos se encuentra uno que concluye que nueve de cada 13 bebés que son amamantados consumían niveles altos del químico.
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