Un grupo de aproximadamente 18 migrantes de distintos países se instaló casi a la mitad del puente internacional llamado Puerta México, en espera de que las autoridades de Estados Unidos les reciban para solicitar asilo humanitario.
“Que está lleno y que está lleno, no nos dejan pasar para allá”, expresó Lady Laura, una joven de nacionalidad cubana que junto a los otros extranjeros está pidiendo refugio para escapar de la pobreza.
Las últimas horas han sido las más duras, ya que desde la noche del domingo y la madrugada del lunes estuvo lloviendo, pero nadie ha querido retirarse a pesar de llevar a cuatro menores de edad entre todos ellos.
Había una embarazada, a quien las autoridades de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en Inglés) dejaron pasar primero, “pero ya tenía dos días aquí esperando”, relata Lady Laura.
Ella misma mencionó que el suyo es un grupo reducido de personas, si se compara con el que lleva semanas en la misma situación sobre el puente internacional Reynosa-Hidalgo, donde han sido decenas las personas que han pasado noches y días tratando de cruzar la línea fronteriza para pedir que se les dé la condición de refugiados.
En estos días algunas organizaciones religiosas y defensores de migrantes les han llevado agua y comida, aunque lo más necesario para ellos es que les dejen llegar a la oficina de Aduana para hacer valer su derecho de asilo, que está consagrado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y en tratados internacionales.
Oswaldo Rodríguez, otro de los migrantes refirió que en el grupo hay personas de Honduras, Brasil y Cuba, quienes no han podido pasar de la línea que marca el límite entre México y Estados Unidos, ya que agentes del CBP mantienen un puesto de vigilancia a en ese punto que les impide el ingreso.
“Lo único que nos han dicho es esperen”, expresó, al añadir que la justificación para no dejarlos ingresar a la oficina a pedir refugio es que ya hay muchas personas antes que ellos en antesala para ser atendidos.
Aunque los entrevistados dijeron estar dispuestos a seguir esperando por más tiempo y tener mucho interés por llegar al vecino país, en los últimos días el presidente Donald Trump ha endurecido las declaraciones contra la llegada de más inmigrantes sin documentos y su política de cero tolerancia.
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