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La onda de calor que afecta a Tamaulipas ha propiciado la muerte de alrededor de 2 mil cabezas de ganado, en el norte y centro de la entidad, luego que productores del sector pecuario carecen de pastizales para alimentar a sus hatos.
Por lo que de continuar estas condiciones y la falta de precipitaciones pluviales, la situación podría empeorar, dijo Felipe Vanoye González, integrante de la Asociación Ganadera Ejidal, adherida a la Confederación Nacional Campesina.
Sobre todo sus compañeros del sector social que carecen de los recursos necesarios para adquirir insumos, minerales y pacas son los que más viven esta problemática, por lo que están demandando el apoyo de las autoridades correspondientes para enfrentar este estiaje.
Incluso, dice, que hay ganaderos que están vendiendo sus reses a muy bajos precios para evitar tener mayores pérdidas, “y eso es aprovechado por las personas dedicadas a la compra de ganado”, apuntó.
Los ganaderos desean comercializar a precios muy bajos el ganado viejo y flaco, hatos que son los más vulnerables a contraer enfermedades o morir por la falta de alimento y agua.
“La muerte de ganado bovino ha sido más frecuente por enfermedades como plagas de garrapatas, mosca prieta y el mal de paleta, y algunos por falta de alimento y agua”.
Actualmente la mayoría de las presas están secas, por lo cual, productores pecuarios tienen que llevar el vital líquido en pipas o tinacos, además de comprar pacas, melaza o bloques nutricionales para mantener al ganado.
Concluye que esta situación crítica se vive más en los municipios de Victoria, Llera, Soto la Marina, Mante, Nuevo Laredo, Valle Hermoso, Matamoros y Rio Bravo por mencionar, donde se han registrado las temperaturas más altas en los últimos días, las cuales superan los 40 grados centígrados.
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