Gobierno de México y empresarios establecen un tope de 24 pesos por litro de gasolina durante seis meses.

La presidenta Claudia Sheinbaum destacó esta medida como “histórica” e informó que su objetivo es proteger la economía de las familias mexicanas y garantizar la estabilidad en el mercado de combustibles.



EFE.

El gobierno de México y representantes del sector gasolinero firmaron este jueves un acuerdo para establecer un tope de 24 pesos (casi 1.2 dólares) por litro de gasolina regular durante los próximos seis meses.

La presidenta Claudia Sheinbaum destacó esta medida de “histórica” e informó en conferencia de prensa que tendrá una vigencia inicial de seis meses, con el objetivo proteger la economía de las familias mexicanas y garantizar la estabilidad en el mercado de combustibles.

“Hoy firmamos un acuerdo histórico con gasolineros para establecer de manera voluntaria el precio máximo de 24 pesos (casi 1,2 dólares) en la gasolina magna (regular). Protegemos la economía de las familias”, compartió Sheinbaum, luego de detallar que el acuerdo se revisará y ajustará de ser necesario.

El acuerdo, denominado “Política Nacional para Promover la Estabilización del Precio de la Gasolina en Beneficio del Pueblo de México”, fue suscrito en el Salón Tesorería de Palacio Nacional, en el centro de la capital de la Ciudad de México.

Además del director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), Victor Rodríguez, participaron importadores, comercializadores, distribuidores y transportistas de combustibles; además de autoridades como la secretaria de Energía, Luz Elena González y el subsecretario de Hidrocarburos, Juan José Vidal, entre otros.

La presidenta Sheinbaum enfatizó que el pacto es de carácter voluntario y no impone obligaciones legales a las partes firmantes.

Para facilitar el cumplimiento de este tope de precios, Pemex implementará un precio mayorista nacional en sus terminales de almacenamiento y reparto (TAR) para la gasolina regular.

Esto permitirá que las estaciones de servicio ofrezcan el combustible a los consumidores a un costo menor a los 24 pesos (casi 1.2 dólares) por litro.

En este sentido, el plan pretende que exista un diferencial razonable de hasta dos pesos entre el precio mayorista y el precio al público, sin incluir el Impuesto al Valor Agregado (IVA).

En tanto a los estímulos que calcula semana a semana la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) se informó que la dinámica se mantendrá sin cambios.

Expertos han señalado que el acuerdo podría no considerar las diferencias de costos logísticos entre distintas regiones del país, lo que podría afectar la rentabilidad de algunas estaciones de servicio y, potencialmente, fomentar prácticas ilegales como el robo y venta clandestina de combustible.

Además, el pacto excluye a las estaciones ubicadas en zonas fronterizas, donde ya existe una estructura de precios distinta debido a estímulos fiscales específicos.

Jorge Mijares Casas, presidente de Onexpo Nacional, la principal asociación de empresarios gasolineros en México, declaró que se mantendrán mesas de trabajo para adecuar y evaluar el acuerdo periódicamente.

Asimismo, confió en que a partir de la próxima semana el precio de la gasolina se ajuste conforme a lo pactado, destacando que Pemex realizará un esfuerzo mayor en este proceso.

Por su parte, la titular de la Secretaria de Turismo reconoció que la iniciativa suma esfuerzos “para evitar que el costo de la gasolina se convierta en una incertidumbre y en un impacto para la economía de las familias”.

“El precio de la gasolina, impacta directamente en el bolsillo de las familias mexicanas, en los costos del transporte, los alimentos, la industria, los bienes y servicios generales. Con esta estrategia, garantizaremos la accesibilidad a las familias y un margen de ganancia justo para las empresas”, concluyó González.

.