La Opinión.
El próximo martes por la noche, con las reglas bien definidas para mantener el orden frente a los televidentes estadounidenses, Tim Walz, candidato demócrata a la vicepresidencia, intercambiará opiniones con el republicano James David Vance, quien también aspira a ocupar la vicepresidencia.
La producción del debate entre los compañeros de fórmula correrá a cargo de la cadena de televisión CBS News e iniciará a las 9 p. m., hora del Este, con Norah O’Donnell y Margaret Brennan, como moderadoras.
Previamente se estableció que Tim Walz ocupará el costado izquierdo del escenario detrás del podio; en tanto que James David Vance se colocará en el extremo opuesto y ambos deberán permanecer de pie durante los 90 minutos que dure el evento, el cual se efectuará sin público en el estudio de televisión.
Los moderados primero presentarán al candidato del partido en el poder es decir inicialmente hablarán del compañero de fórmula de Kamala Harris.
Se estableció que ninguno de los participantes tendrá declaraciones de apertura.
Con el objetivo de que los candidatos puedan refrescar un poco sus ideas, se fijaron dos descansos para el debate, los cuales serán de cuatro minutos cada uno.
Asimismo, cada participante tendrá dos minutos para responder a cada pregunta formulada y su rival contará con el mismo tiempo para debatir la declaración de su oponente.
Gracias a que tendrán un cronometro de frente, los políticos podrán ver correr el tiempo destinado, tanto para emitir sus respuestas a las preguntas, como para corroborar que su rival no se exceda de segundos.
Sobre el cierre del debate habrá dos minutos destinados para los alegatos finales expresados por cada candidato, pero debido a que ganó un sorteo previo, J.D. Vance tendrá el último comentario en el evento.
Cabe señalar que los participantes en ningún momento podrán interactuar con las personas de su equipo ni tampoco presentarse con notas de apoyo.
En el estudio se les proporcionará un bolígrafo, un bloc de papel y una botella de agua.
A fin de mantener el orden entre los candidatos, la cadena de televisión a cargo del debate se reserva el derecho de silenciar los micrófonos de los participantes si lo considera necesario.
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