Texas Tribune.
Un niño que viajaba a Chicago como parte del programa de autobuses para inmigrantes del estado murió, según un comunicado del viernes por la tarde de la División de Manejo de Emergencias de Texas.
El Chicago Tribune informó que el niño de 3 años murió el jueves cuando el autobús ingresaba a Chicago. El Departamento de Salud Pública de Illinois confirmó al periódico que la agencia estatal está investigando la muerte.
TDEM dijo que después de que la salud del niño comenzó a deteriorarse, el autobús se detuvo y llamaron a una ambulancia. El niño fue llevado a un hospital local, donde murió.
La declaración de TDEM no incluyó información sobre la edad, el género o la nacionalidad del niño. La agencia dijo que todos los pasajeros en el autobús fueron procesados por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. y la ciudad de Brownsville, lo que incluyó un control de temperatura y un examen médico. Ningún pasajero había mostrado signos de fiebre o problemas médicos, dijo la agencia.
Según funcionarios estatales, los pasajeros fueron liberados por el gobierno federal y eligieron voluntariamente ir a Chicago después de firmar una renuncia de consentimiento.
“Cada autobús está abastecido con alimentos y agua, que se distribuyen a bordo, y hace paradas a lo largo del viaje para repostar y cambiar de conductor. Los migrantes pueden comprar provisiones adicionales o desembarcar en cualquiera de estas paradas”, se lee en el comunicado de TDEM.
Desde abril de 2022, el gobernador Greg Abbott ha estado transportando a inmigrantes a ciudades lideradas por demócratas en todo el país, lo que, según él, tiene como objetivo brindar alivio a las comunidades fronterizas de Texas. Los críticos de Abbott han dicho que está utilizando a los inmigrantes como peones para ganar puntos políticos. Recientemente, Abbott anunció que más de 4600 inmigrantes fueron transportados en autobús a Chicago el año pasado.
La oficina del gobernador no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios hasta el viernes por la noche.
En mayo, un niño de 8 años murió mientras estaba bajo la custodia de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. Una investigación interna sobre la muerte de la niña descubrió múltiples fallas por parte del personal contratado que trabajaba en una estación fronteriza federal en Harlingen, incluida la falta de contacto con los médicos a pesar de las súplicas de ayuda de la madre.
“Podemos, y lo haremos, hacerlo mejor para garantizar que esto nunca vuelva a suceder”, dijo el comisionado interino de CBP, Troy Miller, en el momento de la publicación de la investigación.
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