La sustitución de importaciones de origen asiático que acordaron México, Estados Unidos y Canadá bajo el tratado del T-MEC, se enfocará de manera inicial en sectores como el automotriz, aeronáutico y electrodomésticos, comentaron los representantes de las cámaras empresariales a El Sol de México.
El presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), José Abugaber, indicó que las tres naciones van a incrementar y en algunos casos a iniciar la producción de materias primas que sólo llegaban del continente asiático.
“La industria aeronáutica está buscando la producción de tornillos específicos para la fabricación de aviones, los cuales solo pueden importarse. También se busca producir televisores, autopartes y electrodomésticos. Hay que provocar que se de sarrolle la industria”, dijo Abugaber en entrevista con este medio.
Si México aprovecha las oportunidades que le brinda el nearshoring y toda la regionalización de la industria, podría ingresar hasta 35 mil millones de dólares, enfatizó el presidente de la Concamin tomando de referencia información del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Los últimos datos de Banco de México (Banxico) indican que en noviembre de 2022, las importaciones sumaron un total de 49 mil 407.4 millones de dólares, de las cuales, el 38.3% provinieron del continente asiático, siendo China, el país de donde más importa México conn un total de 9 mil 44 millones de dólares .
Para el presidente nacional de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), José Medina Mora, se trata de la oportunidad más importante para la región de Norteamérica desde la crisis generada por la pandemia del Covid-19, la cual ocasionó la paralización de las cadenas de suministro.
“La postura del sector empresarial es exigir a los gobiernos claridad y certeza jurídica para la inversión”, comentó Medina Mora en entrevista. Durante los próximos cinco años, Estados Unidos realizará una inversión “masiva” en la manufactura y ensamblaje de semiconductores, los cuales se utilizan en la fabricación de teléfonos, tabletas, automóviles y otros productos electrónicos, expuso Medina Mora.
En tanto, la vicepresidenta de la Comisión de Comercio Exterior de la Cámara Internacional de Comercio (ICC, por su sigla en inglés), Turenna Martínez, destacó que la regionalización busca desarrollar cadenas de suministro más rápidas y eficaces, cuestión que impulsará la competitividad de América del Norte.
“Se trata de un compromiso entre los tres países que ayudará a enfrentar futuras disrupciones en el comercio exterior. Hay que desarrollar un suministro mucho más local. Se trata de crear una región económica que pueda ser adversa a choques externos”, dijo Martínez.
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