EFE.
Los migrantes realizan un aporte considerable a la economía del área metropolitana de El Paso, Texas, y en 2019 contribuyeron con 8 mil 600 millones de dólares al Producto Interno Bruto de la ciudad, según un informe divulgado por una coalición de más de 145 empresas.
“El Paso ha sido siempre una ciudad de migrantes“, dijo Jon Barela, presidente de The Borderplex Alliance. “Es parte de nuestra historia y de nuestros genes. Hoy los migrantes contribuyen en gran forma a nuestra economía”.
El informe señala que en 2019 había 202 mil migrantes que conformaban el 24.1% de la población en toda el área metropolitana, siendo los mexicanos el 90.8% de esos residentes, seguidos por los filipinos con 1% y los alemanes con 0.9%.
Los hogares de migrantes en 2019 tuvieron un ingreso combinado de 4 mil 800 millones de dólares, de los cuales casi 592 millones se pagaron en impuestos federales y 441 millones en impuestos estatales y locales.
Esto dejó a los migrantes con un poder adquisitivo de casi 3 mil 800 millones de dólares, equivalentes al 29.2% del poder adquisitivo total en la ciudad texana fronteriza con México, según el informe.
“El Paso es otro ejemplo notable del impacto positivo de los migrantes en las comunidades de todo Texas“, sostuvo Chelsie Kramer, del American Immigration Council.
“Además de sus voluminosas contribuciones en impuestos y poder adquisitivo, los migrantes en El Paso suman casi el 31% de los trabajadores en áreas de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas”, añadió Kramer.
Los migrantes en el área de El Paso aportan el 48% de los trabajadores en la agricultura, el 44.5% los empleados en la construcción y el 42.7% de los que laboran en fábricas, apuntó el informe.
En 2019 había en El Paso 95 mil 200 migrantes naturalizados como ciudadanos estadounidenses, y otros 32 mil 800 que podían obtener ese beneficio.
Había además unos 46 mil 200 migrantes indocumentados que vivían en el área metropolitana de El Paso, y el 95% de ellos procedían de México, indicó el estudio.
Los hogares de migrantes indocumentados tuvieron en 2019 un ingreso combinado de 757.4 millones de dólares, de los cuales 35.2 millones fueron a impuestos federales y otros 37.5 millones a impuestos estatales o locales, dejando 681.7 millones de dólares en poder adquisitivo para esos migrantes.
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