Delia Alvarez.
Se dice que la propia experiencia es el mejor camino para aprender y a sus 60 años y con 33 años de práctica legal como abogada y también como educadora, Adela Kowalski desea ser una juez pro-activa para la nueva Corte de Distrito 484 en el Condado de Cameron, cuyas acciones vayan mas allá de dictar una sentencia a un delincuente juvenil sino lograr un impacto positivo en la vida de cada joven que va a juicio.
Al cuestionarle a Kowalski, porque decidió contender para la Corte de Distrito 484, después de una larga trayectoria en el ámbito legal y como profesora de la Universidad de Texas en el Valle de Rio Grande, (UTRGV, por sus siglas en inglés), respondió que “salió esta oportunidad que forzosamente tenía que aprovechar porque es el sitio perfecto en donde yo puedo usar toda la sabiduría, experiencia y conocimientos que he obtenido durante los 33 años que he practicado leyes”.
Y agregó “seria una lástima no hacerlo y no ofrecer a mi comunidad y al condado de Cameron todo lo aprendido, y ofrecer mi servicio como la única candidata en la contienda para Juez de Distrito con más experiencia y que sabe de la seriedad y compromiso que requiere”.
Enfatizó Kowalski que una corte de esta magnitud, necesita a alguien con madurez y humildad y estar muy consciente de que “tenemos en nuestras manos la vida de seres humanos, pues uno como juez adquieres la autoridad y poder de salvar una vida humana, y al mismo tiempo responder ante nuestra sociedad en la que vives, protegerle de gente peligrosa”.
La candidata considera que con 33 años de experiencia en leyes, es muy importante tener una persona con madurez que tenga la capacidad de evaluar los casos, y aunque cada caso es diferente, es prioritario tratar los casos con igualdad.
“Esta corte en particular me atrajó mucho porque se maneja todo tipo de caso criminal de grado serio que pueden llegar hasta pena de muerte, y yo soy la única candidata que ha manejado desde una infracción de tránsito hasta un homicidio agravado penado como ofensa capital o ya sea condena perpetua, pero lo que más me gusta de esta corte es que tiene la autoridad de manejar casos de menores acusados, se presentarán ofensas juveniles, en donde un delincuente joven puede alcanzar hasta 50 años de prisión, que son situaciones raras pero si ocurren. También hay casos de mucha seriedad en donde un juvenil de 14 años o más puede ser enjuiciado como un adulto y no tratado como un menor de edad, dependiendo de las circunstancias y la seriedad del caso, como las acciones cometidas”.
Pero, añadió Kowalski, “lo más importante para mí, es salvar a una persona joven y ayudarle a cambiar su vida y que sean ciudadanos productivos, mi intención es cambiar lo negativo a positivo, hacer un cambio en la vida de otro ser humano”.
Reiteró que “pienso que soy la única candidata que que puedo representar la corte de Distrito 484 con conocimiento y experiencia, además de ser docente desde los 13 años, pues era maestra de inglés en la escuelas de mis padres durante seis años, también daba clases de catecismo, español , inglés como segundo idioma sin recibir un pago, siempre me ha fascinado enseñar”.
Desde el 2003 Adela Kowalski ha dado clases de Evidencia Criminal en la UTRGV, se ha desarrollado como fiscal designada de homicidios y ofensas capitales en la corte del Condado de Cameron, así como también ha funjido desde el 2013 con el procurador Luis Saenz como fiscal federal y estatal y previo a esto durante 10 años del 2002 al 2012 ejerció la practica legal en el despacho privado de su esposo Noe Garza, con quien tiene 3 hijos.
“Tanto la abogacía como el dar clases son mí pasión, y no trabajo por necesidad, me gusta lo que hago, es lo mío, se trata de ayudar, lo he hecho toda mi vida y yo se que puedo ser un factor de cambio en la vida en niños y jóvenes que viven en situaciones difíciles, tengo los conocimientos para poder hacerlo, a veces los jueces creen que comprenden todo pero no, yo he estado en ambos lados en una corte y he aprendido a usar la empatía, a analizar que fue lo que impulso a una persona a comete una mala acción, a ver las circunstancias que lo orillaron, pero que también se le considere por las acciones buenas que hizo durante el proceso judicial”.
Kowalski añadió que se debe ser analítico en un juicio., primero hay que diagnosticar el problema y después hacer responsable al enjuiciado por lo que hizo, pero es primordial ver referencias, si cumplir con requisitos del proceso, para un ofrecerle mejor trato y finalmente brindarle educación, que es sumamente importante para cambiar su vida, así como brindarles orientación que les permita contener su carácter y todos el tipo de ayuda para ayudarle a tener un cambio positivo en sus vidas.
Indicó que su intensión es ponerse en contacto en instituciones educativas locales y mencionó al Distrito Escolar Independiente de Brownsville como ejemplo, para iniciar un diálogo que se enfoque en como prevenir que niños problemáticos terminen en prisión cuando sean adultos, pues “a veces el juez tiene que tomar el lugar de un padre, comprometerse a ayudar y eso requiere disciplina, yo puedo ayudarlos y los voy a ayudar”.
Mencionó Kowalski que como bogada y fiscal ha visto que la mayoría de quienes están en prisión, empezaron a tener problemas en temprana edad, cuando eran jóvenes o desde la niñez y “creo que el problema es la falta de atención en el proceso que usan para juzgarlos”.
“Yo soy Adela Kowalski, toda mi vida he ayudado a la gente y quiero seguir haciéndolo, se que puedo lograr más, la satisfacción de ser maestra es muy gratificante, sobre todo cuando mis alumnos convertidos en abogados viene a darme las gracias por el conocimiento compartido, me encanta enseñar, puedes sacar al maestro de la clase pero no a la clase del maestro, desde niña aprendí a servir y lo seguiré haciendo, si la gente me da su voto de confianza, hoy se me presenta esta oportunidad bendita, donde puedo usar mis talentos y ayudar a los jovenes a tener una vida mejor y a proteger a mi cominidad”, puntualizó.
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