Greg Abbott, gobernador de Texas, aseguró que no habrá más cierres en el estado. Asimismo, dijo que su prioridad es “trabajar para curar a los que tienen Covid-19” para que puedan dejar los hospitales y volver a su vida normal.
El plan de Abbott para frenar la propagación del coronavirus se basará en “las métricas de hospitalización”, según dijo un portavoz del gobernador a la cadena NBC News.
A medida que algunas comunidades experimenten un aumento en las hospitalizaciones, el estado de Texas trabaja estrechamente con los funcionarios locales para proporcionar rápidamente los recursos necesarios para abordar estos picos y mantener a los tejanos seguros”, dijo Renae Ez.
Por su parte, Abbott seguirá adelante con el plan que anunció en septiembre. Se establece que reducirá la reapertura de negocios. Esto aplica en caso de que el número de pacientes de Covid-19 supere el 15% de su capacidad hospitalaria durante una semana.
Los funcionarios locales tienen plena autoridad para hacer cumplir estos protocolos existentes para ayudar a mitigar este virus, incluyendo los límites de ocupación y los requisitos de mascarillas. Los protocolos demostraron ser eficaces para frenar la propagación durante el verano y contener el Covid-19. Pueden seguir funcionando, pero sólo si se hacen cumplir”, indicó Ez en un comunicado.
Hasta el miércoles 18 de noviembre de 2020, Texas registró más de 1.1 millones de casos y 20 mil 274 muertes. En las últimas dos semanas, en el estado aumentó en un 47% los contagios.
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