Las autoridades sanitarias de Corea del Sur reportaron 48 nuevos casos de COVID-19 mientras luchan por contener un resurgimiento que arruina parte de los logros que el país batalló para obtener en el combate con el coronavirus.
Las cifras dadas a conocer por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Corea del Sur eleva los casos confirmados a nivel nacional a 12.421, incluyendo 280 decesos.
Los Centros señalaron que 24 de los nuevos casos se registraron en la zona metropolitana densamente poblada de Seúl, que ha sido el epicentro de la pandemia en el país desde finales de mayo.
Otros 10 casos fueron reportados en la ciudad de Daejeon, en el centro del país, lo que indica que el virus ha empezado a propagarse más extensamente, al parecer como resultado de un incremento en las actividades públicas y la complacencia en el distanciamiento social.
Los Centros agregaron que al menos cerca de 200 contagios han sido vinculados con empleados en una compañía de ventas casa por casa en Seúl, que por lo general contrata a personas mayores de 60 años. Otros 70 casos fueron ligados a un club de tenis de mesa en otra zona de Seúl, cuyos integrantes también propagaron el virus en una iglesia.
Las autoridades del sector salud detectaron previamente cientos de casos relacionados con clubes nocturnos, trabajadores de comercio electrónico y congregaciones religiosas.
.